Skip to content Skip to sidebar Skip to footer

El origen del bayú

el origen del bayúAunque a muchos les cueste creerlo bayú, esta palabra de tanta raigambre y aceptación en la isla de Cuba, es una completa desconocida. No digamos a los lectores de nuestra literatura cubana. Si no a los más viejos de la isla, que siempre se han dedicado más a gozar de los placeres que dicha palabra comporta que a su verdadero origen etimológico y correcta definición.

Si acudimos al diccionario de la RAE, principal mamotreto de las palabras de nuestra lengua y docta referencia para su buen uso, resulta que la palabra bayú viene definida como:

bayú

  1. m. Cuba. Casa, sitio o reunión indecente u obscena.

Real Academia Española © Todos los derechos reservados

No hay más. Después de tantos años, tanto uso y abuso de la palabra y su definición es única, precisa y concisa: casa de lenocinio.

El bayú es más sabroso

Sin embargo, no nos podemos conformar con tan triste historia. Recuerdo una tarde, hace ya bastantes años, escuchaba al conjunto Credence Clearwater Revival con su canción titulada Born on the Bayou. Me vinieron a la cabeza reminiscencias de la letra que hablaba de un tipo nacido en el bayú. Deduje, entonces, que este tendría que ser un sitio en el que viviesen personas o, en el peor de los casos, el producto de una mala madre. Muy pronto me fui a buscar la letra de la canción.

De todo ese embrollo saqué muchas cosas en claro. Pero de lo que nos interesa, el bayú en Nueva Orleans es lo que en Cuba conocemos como el palenque: lugar alejado y de difícil acceso, en el que se refugiaban los esclavos negros fugitivos.

[vc_cta h2=”¿Ya te suscribiste a Atmósfera Literaria?” h2_font_container=”tag:h2|text_align:center” h2_use_theme_fonts=”yes” h2_css_animation=”fadeIn” add_button=”bottom” btn_title=”¡Subscríbeme!” btn_color=”sky” btn_align=”center” btn_i_type=”openiconic” btn_i_icon_openiconic=”vc-oi vc-oi-ok” btn_bordered=”yes” css_animation=”fadeIn” use_custom_fonts_h2=”true” btn_add_icon=”true” h2_link=”url:https%3A%2F%2Fwww.atmosferaliteraria.com%2Fsign-up%2F|target:_blank” btn_link=”url:https%3A%2F%2Fwww.atmosferaliteraria.com%2Fsign-up%2F”]Si todavía no lo has hecho, hazlo para recibir en tu bandeja de entrada ofertas especiales, novedades editoriales, cupones de descuento y mucho, ¡mucho más![/vc_cta]

¿Cómo las casas de lenocinio son el bayú?

Para ello hay que acudir a la Historia. Resulta que durante el período francés del que la Luisiana era una provincia, desde la ciudad de Natchez, pasando por Baton Rouge hasta las afueras de Nueva Orleans —en todo lo que forma el delta del Misisipi. Allí existían distintos sitios a los que las autoridades francesas destinaban a todas las mesdames del comercio carnal a ejercer su profesión. Así fue durante muchos años, pero también fueron los lugares a los que, con posterioridad, se fugaron los esclavos de las plantaciones de algodón, tabaco y azúcar.

En todo el delta del Misisipi los pantanos son conocidos como bayous. Su significado proviene del dialecto choctaw de los aborígenes que así llamaban (bayuk) a los arroyuelos o corrientes de agua lenta. Entonces, servían para designar la masa de agua formada por los brazos y meandros del río:  zonas de difícil acceso.

Fue con posterioridad, tras la venta de la Luisiana a Estados Unidos, que las mesdames, horrorizadas por la pérdida colonial, se plantearon dónde iban a ir a vivir y continuar con su exquisito negocio alejadas de la incipiente manada de tramperos y aventureros más dispuestos a despellejar osos que a tirar de sus enaguas. Enardecidas por la patria y que los días de gloria habían llegado, decidieron emigrar a otras colonias donde reinasen los Borbones; aunque este fuera español. En definitiva, allí también oirían en el campo mugir a esos soldados feroces que vendrían a sus brazos.

El bayú habanero

Así fue que arribaron a La Habana y, muy pronto, tras desviarse el comercio hacia la isla, los galeones franceses fijaron amarras y sus alborotados marinos desembarcaron con una sola pregunta en la boca:

—Oú est le bayou?

Muy pronto la ciudadanía cubana asoció semejante pregunta a las casitas de la zona extramural del barrio de Colón. Allí coexistían con la población blanca y los “curros del manglar”, negros esclavos que laboraban en las huertas y que abastecían a la parte intramuros del territorio, las más conocidas casas de lenocinio en las que se establecieron las francesas.

De ahí a nuestros días, como diría nuestro Cabrera Infante difunto, el resto es ruido. Pero seguimos haciéndolo.

Luife Galeano

 

3 Comments

  • AlexPadron
    Posted 5 noviembre, 2019 at 11:24 pm

    Vaya que es un dato útil. Me lo apunto para futuras referencias!

    • Luife Galeano
      Posted 6 noviembre, 2019 at 1:16 pm

      Bien sûr, M. Padrón. Je peux imaginer le jeune Carlen errant en Louisiane.
      A ver qué encuentra por allí.

  • Salvador F. Morales
    Posted 6 noviembre, 2019 at 2:33 pm

    Muy interesante, eso ilustra a muchas personas, sobre todo los que pensaban que J.C. Fogerty declaraba en la canción, haber nacido en un prostíbulo. No obstante es bueno comentar, que la palabra bayú, está casi en desuso en Cuba desde hace muchos años y no porque en Cuba no haya prostíbulos (al menos públicos y notorios) sino porque hace tiempo la gente dice prostíbulo y no bayú, de la misma manera que nadie usa “chola” por cabeza o” habitant”e por persona de baja catadura. Las personas menores de cuarenta años apenas conocen la palabra bayú o “aquel” significado de la palabra, y cuando alguien la usa es asociada siempre a: lugar, sin disciplina, sin orden con las cosas tiradas o sucias.

Leave a comment

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.